Aprende ¿Cómo fomentar hábitos positivos en los niños? los cuales utilizarán a lo largo de toda su vida y les permitirán sentirse orgullosos como seres humanos, siendo por otro lado rutinas saludables y positivas que les ayudarán a desarrollar sus destrezas y habilidades, manteniendo su cuerpo libre de enfermedades.
Importancia de los hábitos positivos en los niños
Al crecer, desarrollamos ciertos hábitos que son parte de nuestra cotidianidad; algunos de ellos nos hacen sentirnos orgullosos, pero otros no tanto.
No obstante, lo cierto es que en retrospectiva muchos de estos comportamientos los tenemos desde la infancia, lo que nos lleva a pensar que es posible que nuestros padres se hayan equivocado en este sentido y quizá no nos fomentaron los hábitos positivos requeridos.
Sin embargo, esto es algo que podemos enmendar al conocer ¿cómo fomentar hábitos positivos en los niños? garantizando que su desarrollo personal sea exitoso y que se manejen con soltura y orgullo dentro de todos los ámbitos.
Los hábitos positivos en los niños son prioritarios para la conservación de su salud, un adecuado desarrollo mental y crecimiento, además de toda una serie de comportamientos que deben seguir a fin de mantener una conducta aceptada dentro de la sociedad.
¿Cómo fomentar hábitos positivos en los niños?
Fomentar hábitos positivos en los niños es fácil, más aún si se comienza a temprana edad, cuando prácticamente son un cuaderno sin escritura y donde se apuntan actividades que imitarán de nuestro comportamiento, tales como:
- Beber agua en cantidades suficientes para mantener su cuerpo bien hidratado.
- Leer, una actividad que definitivamente debe ser creada como hábito en el niño, lo que desarrollará en él un gusto por la lectura de incalculable valor durante su formación educativa.
- Comer frutas y verduras, al igual que comidas balanceadas, evitando en lo posible el exceso de dulces o platos tipo chatarra.
- Cepillarse los dientes al menos tres veces al día o después de realizar alguna comida.
- Lavarse las manos con frecuencia y especialmente luego de ir al baño
- Realizar actividades físicas como correr, caminar, saltar o algún deporte en concreto.
- Ordenar su cuarto, ropa y todos sus juguetes, útiles escolares o enseres domésticos.
- Limitar el uso de la TV, dispositivos electrónicos como tabletas, móviles, consolas y similares.
- Ser cordiales y agradecidos, contestando siempre que se les realice una pregunta, dando gracias o respondiendo cualquier saludo. Con este sencillo hábito se desarrollan en el niño habilidades de inteligencia emocional que facilitarán su comunicación con los demás y les harán felices.
- Dormir lo suficiente para reponer las energías consumidas durante el día. Siendo en este caso una buena rutina la lectura de un cuento con el fin de conciliar rápidamente el sueño.
- Regirse por horarios para la realización de sus actividades rutinarias
- Contar con ciertas horas de la semana para su entretenimiento y realización de actividades de esparcimiento.
- Pasear en compañía de sus familiares y alcanzar el mayor aprendizaje posible sobre los lugares que visite.
Muchos de estos hábitos pueden ser fomentados por los padres mediante la realización de diferentes actividades, tales como la lectura de fábulas donde los personajes deben cambiar sus costumbres para ser incluidos en un grupo de amigos o moralejas a través de la cuales se hace indicación expresa de que los flojos no se ganan ni el pan que consumen, entre otras.
Para incluir buenos hábitos en los niños es clave escucharlos, establecer rutinas y obligaciones, así como tomarse unos cuantos minutos al día para conocer sus inquietudes y necesidades.
Además, es preciso fomentar su colaboración en las labores del hogar, buscar su empatía enseñándoles todo lo que nos afecta su comportamiento negativo y premiando o aplaudiendo cada uno de sus hábitos positivos a fin de reforzar su autoestima y confianza, herramienta que manejarán a lo largo de toda su vida.